Así como en la leyenda del Avatar sólo Katara mantenía la esperanza de ver de vuelta al Último Maestro Aire (Gordon Cormier), en la vida real muchos jamás imaginaron que el personaje de Aang regresaría para una nueva versión en live-action, lo que es una realidad en la serie homónima Avatar: La leyenda de Aang, que llega hoy a Netflix.
El protagonista del exitoso show animado, creado por Michael Dante DiMartino y Bryan
Konietzko y lanzado en 2005 por Nickelodeon, fue personaje de carne y hueso en manos del director
M. Night Shyamalan en un filme que quedó a deber y mucho.
Por lo que un segundo intento parecía arriesgado, y aunque sus nuevos protagonistas no pueden asegurar que logrará llenar cada una de las expectativas, sí garantizan que está hecho con mucho corazón.
Cada versión empieza con la mejor intención y lo que me parece notable de la nuestra es que desde el principio los escritores y creadores fueron muy cuidadosos en respetar el material original, entendían bien que hay una base de fans muy apasionada con respecto al Avatar y, por ende, había una parte que siempre estuvo pensada a su servicio, a pesar de cómo decidieron contar el resto de la historia.
Pero creo que lo que fue lo más inteligente de su parte es que siempre estuvieron conscientes y reconocieron que no podrían hacer una serie toma tras toma y escena tras escena exactamente igual a la animada, así que había cosas que necesitaban adaptarse para tornarla en un live-action, entonces verán diferencias en la línea del tiempo y personajes emergiendo de diferentes lugares a diferencia del show original, pero ya sea que terminen amándola o no, deben saber que tanto los creadores como el resto de todos los involucrados tomamos cada una de las decisiones con mucho cuidado”, destacó Daniel Dae Kim, quien interpreta a Ozai, el Señor del Fuego.
Si bien, al final ni DiMartino ni Konietzko formaron parte de esta adaptación, la trama se centra en el fundamento original que estos crearon, partiendo de cuando las cuatro naciones: Agua, Tierra, Fuego y Aire vivían en armonía, hasta que la nación Fuego decidió atacarlas para intentar dominar su mundo, dejando su última esperanza en el Avatar, el único capaz de dominar los cuatro elementos y poner fin al horror.
Ahí es donde entra Aang, quien con ayuda de sus nuevos amigos Sokka (Ian Ousley) y Katara (Kiawentiio), deberá entrenar para fortalecer sus poderes y ayudarlos a luchar contra el temible señor del fuego Ozai y el príncipe heredero Zuko (Dallas Liu).
Albert Kim (director) se cuestionó si debía continuarlo o no (cuando los creadores se bajaron del barco), pero es alguien que trabajó mucho y se hizo muchas preguntas como fan y escritor, alguien que se basó en toda esa información para crear esto y que tiene mucho respeto a lo que ellos crearon se mantuvo, y para mí logró muy bien la tarea, fue alguien que se dedicó de lleno y el guion que entregó, los escritores con quienes trabajó, la gente que consiguió, ¡todos se lucieron! Así que el respeto, homenaje y justicia a la serie original está ahí, pero hay que recordar que es una adaptación, no una recreación por completo.
Y quienes están familiarizados con la version original van a reconocer este mundo, sus personajes y pensar que hay un nuevo contexto, entonces habrá nuevos fans que nunca vieron la serie y con esta adaptación se engancharán de la historia, mientras que los originales podrán seguir siendo nerds hablando de algo que aman”, opinó Paul Sun-Hyung Lee, el tío Iroh en el show.
Avatar; La leyenda de Aang, que tiene ocho episodios en su primera temporada, usa el libro uno: Agua, para comenzar con la historia antes planteada y cuya temporada original en la serie animada constó de 20 capítulos.
En la acción real, cada capítulo tiene una duración de una hora en promedio.
Estoy tan emocionado por esto, he podido ver los episodios y muero porque el resto del mundo también lo haga, porque tiene una narrativa que evoluciona a una aventura en escala épica, con visuales geniales, e interpretaciones extraordinarias. ¡Gordon es el Avatar! A mí me emociona mucho por los chicos porque, cuando el mundo pueda verlos y sepan todo lo que pueden ofrecer, la vida les va a cambiar de una manera genial”, celebró Lee.